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El Plan Lector

Existe una estrecha relación entre leer y otros procesos intelectuales complejos y complementarios, como hablar, escuchar y escribir, que posibilitan el desarrollo de las competencias necesarias para la adquisición de aprendizajes.

Las modalidades organizativas recomendadas en los documentos oficiales que se ocupan de los lineamientos curriculares del área de prácticas del lenguaje incluyen las siguientes sugerencias:

  1. Actividades habituales de lectura en el aula o en la biblioteca.
  2. Proyectos institucionales de lectura y escritura.
  3. Proyectos de selección y producción de textos en el aula.
  4. Secuencias de lectura de textos de un mismo género literario en forma espontánea o reglada.
  5. Situaciones de reflexión y sistematización de contenidos relativos al género trabajado.

La lectura es entendida como una de las competencias básicas que contribuyen al desarrollo personal y social del alumno; por eso, la escuela deberá asegurar el contacto permanente de los estudiantes con una amplia variedad de textos a lo largo de la escolaridad.

Esta perspectiva, que interrelaciona la lectura con otros procesos, habilita al Plan Lector como un recurso especialmente indicado para la promoción de la lectura de textos literarios. El Plan Lector con libros de literatura brinda continuidad en la acción de formar lectores autónomos a nivel institucional. Los textos del Plan Lector funcionan como disparadores hacia otras búsquedas y lecturas en casa o en la biblioteca.

Cuando la práctica sistemática de la lectura se instala en la comunidad educativa, los alumnos son los primeros en dejarse llevar por el entusiasmo de este hábito que, una vez iniciado, no tiene retorno.

Al seleccionar los libros que componen el Plan Lector es imprescindible incluir variedad de tipos de textos: libros de cuentos, de poemas, novelas, textos teatrales, antologías de leyendas, mitos… Sostener esa inclusión en todos los ciclos, de acuerdo con los contenidos programáticos de prácticas del lenguaje, favorece la obtención de logros duraderos y permite ajustar paso a paso las dificultades que se presentan con cada género.

A partir de la implementación de un Plan Lector surgirán propuestas y procedimientos integrados en los planteamientos didácticos y metodológicos, necesarios para el desarrollo de las habilidades, estrategias, conocimientos, aptitudes y destrezas del lector competente. Pero ¿cuáles son las estrategias que desarrolla un lector competente?

ESTRATEGIAS QUE CARACTERIZAN AL LECTOR COMPETENTE
  • Define objetivos de lectura.
  • Activa conocimientos previos.
  • Anticipa contenidos (elabora hipótesis).
  • Realiza una lectura recursiva (lee, relee, avanza, retrocede…).
  • Construye progresivamente el significado del texto.
  • Verifica y reformula hipótesis.
  • Identifica y corrige problemas y errores de lectura.
  • Recapitula lo leído para lograr una imagen global del texto.
  • Realiza un resumen de un texto o identifica la idea principal en un párrafo.
  • Elabora esquemas para organizar el contenido.
  • Diferencia lo principal de lo accesorio.
  • Reconoce la estructura del texto.
  • Reflexiona sobre la función predominante en el texto.
  • Relaciona lo leído con otros temas o conocimientos.
  • Opina, comenta, habla y escribe sobre el texto.
  • Utiliza lo leído como punto de partida para la elaboración de textos propios.